Para trabajar, no hay nada mejor que un espacio bien definido dentro de tu hogar. Ya sea en una habitación específica o en un pequeño rincón de la casa, lo importante es que te sientas a gusto para poder ser productivo y desempeñar tu trabajo en condiciones adaptadas. Con la generalización del teletrabajo, la creación de un espacio de trabajo en casa se ha convertido en un requisito indispensable para muchos de nosotros. Aquí tienes algunos consejos e ideas para crear un espacio de trabajo práctico y elegante.
Encontrar el lugar ideal para el escritorio
Antes de colocar el escritorio, es importante saber cuál es el mejor lugar para ubicarlo. ¿En qué habitación? ¿En qué punto exacto de la habitación? En función del espacio con el que cuentes, las soluciones serán muy diferentes y será necesario recurrir a la imaginación. Tu espacio de trabajo también debe estar adaptado a tu actividad. Si lo único que utilizas es un ordenador portátil, no necesitarás la misma superficie que si tienes que colocar planos, diseños o muestras de tela.
Trabajar en el salón
Es el lugar más común para ponerse a trabajar, aunque no es necesariamente el que mejor adaptado está. La sala de estar principal no siempre es el lugar más tranquilo y a veces es fundamental poder aislarse para mantener la concentración. En la medida de lo posible, es aconsejable delimitar el espacio de descanso y separarlo del espacio de trabajo.
Un escritorio de esquina te ofrece la posibilidad de crear un espacio dos en uno: por un lado, una superficie para escribir y, por otro, un lugar donde instalar el equipo informático. Tu espacio de trabajo también puede estar pegado al sofá, una pieza fundamental del salón que es ya de por sí un elemento clave para delimitar la zona de descanso. En ese lugar, el escritorio de teletrabajo se convertirá en una parte central de tu vida diaria. Si el mueble de la televisión deja sitio en la pared en la que está ubicado, puedes crear allí un espacio de trabajo. En cualquier caso, en el salón será mejor que elijas un escritorio sencillo para no sobrecargar la estancia. Puede ir a juego con los demás elementos del mobiliario para lograr un resultado armonioso.
